30 marzo 2012

Amor a los libros

 
The Fantastic Flying Books of Mr. Morris Lessmore fue seleccionado la noche del domingo 26 de febrero de 2012 en la ceremonia de los Óscar como el mejor cortometraje de animación.

El protagonista de la historia, mientras escribe su historia, es transportado por un terrible huracán lejos de su ciudad, que era alegre y en colores, a un mundo triste y gris en el que todo es desolación y además no puede escribir.

Mientras descubre ese horroroso entorno descubre una casa llena de libros con vida en la que puede saciar sus ansias de escribir, de soñar y de imaginar.

The Fantastic Flying Books of Mr. Morris Lessmore fue dirigido por William Joyce y Brandon Oldenburg y producido por Moonbot Studios.
La página oficial del corto es www.morrislessmore.com
Como podéis comprobar se merece el premio, hemos elegido este video para celebrar el Día del libro. Ahora os toca a vosotros escribir una pequeña historia sugerida por el video.

31 comentarios:

alvaro dijo...

Álvaro es un amante de los libros, pero un día todos los libros se quedan sin historias y todo el mundo se queda gris excepto en un lugar maravilloso y de color, de repente vio a una mujer que unos cuantos la hacían volar, y uno de esos libros le llevo a una casa.
Álvaro muy curioso entro en ese lugar que estaba habitado por libros, sin pensarlo se quedo en ese lugar a cuidar de los libros y los libros a cuidar de él.
Pasaron días y uno de los libros se rompió Álvaro descubrió que la única forma de salvarlo era leyéndolo y así fue. Le gusto tanto ayudar a los libros que a medida que pasaban los años escribía libros para darles vida.
En sus últimos años decidió ir repartiendo libros a todas las personas para que pasaran de ser grises a que sus vidas tuvieran color. Álvaro cuando ya sabia que le quedaba poco decidió irse y envuelto entre los libros rejuveneció y salió volando como la mujer que el vio. Los libros desolados y tristes se pusieron en las estanterías pero alguien se acercaba de nuevo a la casa
era una niña, otro lector quedaba seducido por los libros.
¡LA HISTORIA CONTINUABA!

Pablo dijo...

Mr Morris es una persona entregada a los libros, y esta ansioso por escribir un libro, pero un buen día se desató una tormenta tan fuerte que todos los libros de ese lugar se que daron sin palabras, y todas las personas se que daron grises, sin vida, sin libros que poder leer en sus ratos libres. Mr Morris ese mismo día se fué a buscar algún lugar con más vida y más libros que leer, a lo largo de su camino, se encuentra a una mujer, una mujer con una cara como si ubiese encontrado la felicidad, estaba volando con unos libros y fué la primera mujer que vió con color. Más tarda se encontró una libreria, todo le parecía estraños pues todos los libros volaban, al entrar en la biblioteca, Mr Morris enpezo a coger color y ha hacerse amigo de todos los libros, ahora él era el dueño de la biblioteca.
Cuando Mr Morris ya se situó, tubo un problema y esque uno de los libros se moría, era un libro viejo, se le caian todas las hojas. Mr Morris no sabía como ayudarle, pero uno de los libros le dijo que había que leerlo para poder salvarle, Mr Morris cogió el libro y empezó a leerle, haciendo que Morris se enganchara. Al acabar el libro, el libro tuvo mucha más vida que antes, se sentía joven.Mr Morris empezó e vender los libros y a cada vendedor que aparecía le volvía el color t esque los libros dan la vida. Mr Morris se hizo viejo y alfín acabó de escribir su libro, los libros de Mr Morris le devolvieron la juventud, y al final se fué volando con algunos de los libros, Mr Morris brillaba aquel día como nunca. Después a pareció una niña y ella ocupó el lugar de la nueva dueña de la biblioteca. Y esto es el ciclo de los libros. Ahora quiero que os agais esta pregunta ¿Que aríamos sin libros?. Fin

Eva R dijo...

Mr. Morris Lessmore era un hombre a quién le apasionaba leer, así que decidió escribir su propio libro.
Un día, Mr. Morris estaba escribiendo cuando se desató una terrible tormenta que arrancó las palabras de todos los libros, llevándose el color de toda la ciudad.
Cuando Mr. Morris se quiso dar cuenta, lo único que había a su alrededor eran casas destrozadas y personas sin sonrisa, sin color.
Entonces encontró un edificio, lo que parecía una antigua biblioteca.
Allí descubrió centenares de libros, unos eran grandes, otros pequeños, pero todos necesitaban un dueño, así que Mr. Morris decidió cuidarlos.
Una mañana vió que uno de los libros estaba muy viejo y a punto de romperse e intentó repararlo. Pero no se dió cuenta hasta al cabo de un rato de que la única manera de curar a un libro era leerlo.
A pesar de que a Mr. Morris le encantaba cuidar de los libros, pensó que lo correcto sería encontrar un dueño para cada uno de ellos, y así hizo, haciendo que todo el mundo recuperara el color y la alegría.
A estas alturas el pobre hombre ya era un anciano, pero para recompensarle por ayudarles tanto, los libros le devolvieron su juventud.
Finalmente, Mr. Morris abandonó la biblioteca, dejando paso a una nueva dueña, una niña que iba a vivir maravillas entre aquellas estanterías.

viti marron dijo...

Mr.Morris, es una persona apasionada por los libros que decide pasar la tarde escribiendo un libro en un hotel, de repente se desató una tormenta tan fuerte que las palabras salían disparadas de los libros hasta que Mr.Morris comenzó a ser arrastrado por la fuerza del viento, lo primero que vio después del tornado era que toda la gente era gris, todo estaba en blanco y negro,
siguió avanzando y se encontró con una mujer que tenía color, y volaba , sujetando unas correas atadas a unos libros, pero pasó de largo, de repente Morris encontró un libro volador que le indicaba con los dibujos de sus páginas que le siguiera detrás de una valla que tenían detrás, Morris haciendo caso dio un salto ágil con ayuda de su bastón, llegaron a una casa, en color también llena de libros que revoloteaban de lado a lado de aquella extraña casa, entendió que aquel libro le había llevado ahí para cuidar de ellos ya que su antigua ama se había marchado como había visto Morris anteriormente, pasaron días y noches, hasta que Morris encontró un libro viejo y desgastado que se le caían las páginas, lo llevó a un quirófano de libros y lo empezó a coser cuando hubo terminado otro libro le dijo que tenía que leerlo para que volviese a vivir, eso hizo y el libro salió revoloteando,
Morris se fue a la cama para escribir su libro sobre las aventuras que estaba viviendo.
Por la mañana los libros le despertaron, y Morris comenzó a vestirlos y así un día tras otro fue pasando la vida de Morris entre palabras impresas en papel que revoloteaban por una casa lena de estanterías.Morris ya se hizo mayor, y terminó su libro y lo dejó encima de una mesa para que otros pudieran disfrutarlo se iba a marchar cuando una masa de libros se arremolinó en frente suyo y se metió dentro, los libros le elevaros y rejuvenecieron tanto que parecía que acababa de llegar el primer día, salió, y se fue volando como la mujer que vio, cuando se hubo marchado el libro de Morris levanto el vuelo y salió de la casa, dentro de un rato llegó una niña siguiendo a el libro, había llegado otra propietaria de todos aquellos libros, una persona que amaría a los libros tanto, o mas como los anteriores propietarios.

Dani POTATO dijo...

Dani era un hombre al que le encantaban los libros tanto que decidió empezar el suyo propio, un día la ciudad se volvió gris y un tornado empezó a arrasar con todo, y su libro salio volando, y el le siguió, hasta que le cogió y vio que una joven estaba agarrada de unos libros voladores, ella soltó uno que le fue conduciendo hacia una mansión, curioso entro a ver que había, para su sorpresa !Los libros tenían vida! y decidió quedarse con ello cuidándolos vistiéndolos etc.. uno de ellos enfermo, así que el decidió operarle, mientras lo hacia ojeo sus hojas y vio que el libro mejoraba y se dio cuenta de que leyéndolo mejoró su estado, entonces se le ocurrió una idea: convertirlo en un biblioteca, así que todo el mundo de la ciudad gris que iba se pasaba por hay, y cogía un libro empezaba a volver a tener color. Pasaron los años y Dani empezó a envejecer cuando estuvo muy mayor acabo su libro y le coloco en una balda salio y se agarro a unos libros, se rejuveneció y empezó a volar con ellos como la joven que había visto hace muchos años, entonces vio a una niña y le dejo caer un libro volador que la condujo hacia la mansión, la historia volvía a empezar..

Pablo Huidobro dijo...

Mr Morris es un chico amante de los libros, y decide escribir uno, un dia de tormenta y uracanes y de todo se le vuelan del libro todo lo que ha escrito y se le queda en blanco,todo se ha vuelto descolorido menos una chica que se encuentra volando atada a unos cuantos libros como si fuese una cometa,uno de los libros se desato y empezo a volar alrrededor de Mr morris.
le llevo a una biblioteca magica los libros tenian vida por si solos todo era decorado con libros y habia muchisimos entonces empieza a vivir en esa biblioteca acompañado de libros con los que convive muy feliz y cuido de ellos, paso el tiempo y Mr Morris fue enejeciendo, vendia libros y cada libro que daba los niños que los compraban se volvian de color al cabo de un tiempo se fue dejando a los libros ahi solos, todos ellos estaban tristes pero un dia vino una niña que habia sido traida a la biblioteca, era su nueva dueña viviria igual que Mr Morris con ellos.no sabia lo que se esperaba...

lucia de la lastra dijo...

Todo Empieza en aquel viejo hotel.
Mr. Morris Lessmore era un apasionado de los libros hasta tal punto que tuvo la idea de crear su propio libro el mejor libro que jamás hubiera leído.
Estaba sentado en la terraza hotel escribiendo alguna palabra nueva en su libro, parecía una mañana como otra cualquiera, cuando de repente las cosas empezaron a volar por los aires, un tornado le sorprendió. Uno tras otro los libros volaban, las farolas y las casas salían disparadas y tan tremenda era la tormenta que hasta las palabras y letras arrancaba de los libros. Mr. Morris Lessmore protegía como podía la que el tomaba como su obra maestra, lo que no pensaba era que eso quizás podía ser una señal, de que esas palabras no eran las que en aquel libro debía escribir y por eso se despegaban y se dejaban llevar por el viento, aferrándolo en su mano, con su boca, y intentando salvarse también el, aunque con no muy buen resultado ya que junto a su libro el tornado se le llevo.
Cuando el tornado ceso Mr. Morris Lessmore se encontró en un lugar diferente, triste y junto a el estaba su libro solo que sin palabras ni letras. Tan potente había sido que le había llevado hasta un lugar tan gris que era complicado ser feliz allí.
Estaba desorientado y sin pensarlo tomo el primer camino que podía seguir. Entonces una bandada de libros sobrevoló el cielo sobre su cabeza. Junto a ellos una chica joven a la que al parecer llevaban, como un caballo a un jinete, y con ellos traían el color que poco a poco se iba extendiendo por donde pasaban. Mr. Morris Lessmore pensó ¿ porque sus libros vuelan y el mío no? Intento hacerle volar y que nada que no volaba.
Un pequeño libro se dirigió a el:
-sígueme -le dijo mediante dibujos.
Recogió su libro y eso hizo seguirle, hasta lo que aparentemente era una biblioteca mágica ya que sus libros tenían vida propia.
Estaba pasmado ante tan impresionante situación.
Ese lugar le encanto se dio cuenta de que era allí donde de verdad quería pasar su tiempo, ocupándose de aquellos libros de los que ya nadie se acuerda, ya que también se merecen una vida digna.
Les arreglaba, cuidaba, limpiaba daba de comer, hacia todo para que cada uno de aquellos libros de aquellas historias estuvieran felices y no se perdieran para siempre.
Un día+ se acordó de aquel libro suyo al que un tornado había arrancado las palabras y se le ocurrió escribir otras distintas que contaran la historia de aquel lugar, su historia.
Se dio cuenta de que aquellos libros no tenían que ser olvidados ni quedarse allí, se dio cuenta de que podrían hacer muy felices a las personas de aquel lugar que quizás darían un poco de color a sus días grises. Y así lo hizo regalo un ejemplar a cada persona que se lo pedía.
Paso el tiempo y poco a poco al igual que su libro su vida iba acabando, y había llegado la hora de encontrar otra persona que cuidara de aquellos libros para que nunca desaparecieran. Y salió por ultima vez por la puerta que jamás había salido, con el su libro que por fin tenia vida.

Henar dijo...

Amor por los libros:

El Sr.Moritz se encontraba escribiendo un libro en su balcón, cuando de repente una ráfaga de viento comenzó a llevarse las letras de su libro, después las páginas, y por último el libro entero. Las personas no daban crédito, se las estaba llevando el viento, junto con las casas. Todo ocurrió muy rápido, inesperadamente se vieron en el espacio, pero empezaron a descender, a caer a un planeta inhóspito, deshabitado, y curiosamente en blanco y negro, todas las personas, todas las casas, todo se encontraba en blanco y negro.

El Sr.Moritz empezó a investigar, hasta que llegó a una verde pradera, a pesar de que él estaba en esa pradera, seguía en blanco y negro. De pronto pasó volando una bella señorita debido a que iba agarrada a unos libros, ella dejó caer un librote de lomos rojos. Este contenía unas ilustraciones que le mostrabas un camino, el Sr.Moritz lo siguió hasta llegar a una vieja casa, se adentró en ella y allí encontró unos alegres libros que le saludaron al entrar.

El Sr.Moritz empezó a llevar su vida allí y a cuidar los libros, de esta manera sus colores volvieron. Un día tuvo que operar a un libro que se había caído de una estantería, otro día bailó con los libros, y así fueron pasando sus días. Hasta que una tarde decidió dar libros a la gente para que los cuidaran, y así, estas personas podrían volver a tener todos sus colores, a la vez, que ayudaban a unos pobres libros que necesitaban una buena compañía.

Poco antes de morir el Sr.Moritz consiguió terminar el libro que hacía unos años el viento se había llevado.

Cuando el señor falleció, los libros se lo llevaron volando, al igual que a la bella señorita que vio al principio de esta historia. Mientras el Sr.Moritz se marchaba volando, un libro con unas ilustraciones cayó en manos de una niña pequeña, y este le enseñó un camino que debía seguir.

Así esta historia, volvió a empezar.

lucia dijo...

Amor por los libros:
Os voy a contar como es la historia de “Los fantásticos libros voladores”…

Esta historia comenzó con mi libro, el de Mr. Morris Lessmore.
Un hermoso día, estaba yo tratando de escribir, dado mi enorme amor a los libros, mi historia, pero no mi verdadera historia, que esta que ahora os relato, pues ocurrió un suceso que me impidió terminar mi historia pero empezar una nueva y mucho más fascinante.

Me encontraba yo en mi balcón escribiendo, cuando una tormenta apareció de repente y arrancó como con un soplido todas las palabras de mi libro, y con ellas todas las demás cosas, incluyendo el color y la felicidad.
La tormenta lo arrastro todo hasta llevarnos hasta un mundo gris y triste en el que no había palabras.
Decidí seguir caminando, siguiendo los restos de lo que antes habían sido textos, palabras. Hasta que llegue a un campo en el que las cosas empezaban a tener color, mire hacia arriba, había libros volando atados con un correa, estos libros llevaban a una curiosa chica consigo, una que por donde iba pasando iba llenándolo todo de color y felicidad. Pretendí que mi libro también fuera como esos, libros voladores con color y palabras. Pero mis intentos fueron en vano y mi libro seguía igual, esa chica desapareció enseguida, pero dejó conmigo un gracioso libro que parecía saludarme y decirme que le siguiera, asique recogí mi libro y le seguí.
Este simpático libro me guió hasta una hermosa biblioteca llena de libros, que cuando entre se quedaron mirándome, yo entre y investigue el lugar, cuando llegue a un pasillo vi el retrato de la chica que más atrás me había encontrado y al alegre libro de antes tocando el piano con las pies, tocaba la partitura que ahora había en sus páginas.
Al día siguiente desperté, mi alegre libro me ayudó a vestirme, y después di de desayunar a los libros con cereales de letras y les vestí (les puse su forro).
Pero de repente un pequeño libro llamo mi atención con agudos sonidos, este libro se encontraba con uno mucho mayor tanto en edad como en tamaño, parecía enfermo, asique le ayude a bajar y intente recomponerle. Cuando hube acabado, no entendí porque pero el libro seguía sin vivir, de repente vi a mi amigo el libro y lo que me decía era que tenia que leerlo.
Empecé a leer sus páginas una enorme sensación de tristeza, horror y tensión e recorrió todo el cuerpo, era un libro estupendo. Para cuando acabe de leerlo el libro ya se había recuperado del todo.
Y entonces fue cuando decidí empezar escribir esta historia.
Paso el tiempo y un día una señora se acerco a mi librería a adoptar un libro, cuando se lo hubo llevado vi como los dos se iban felices y la señora se volvía de color. Entonces tuve una idea.
Decidí regalar mis libros a las personas para que fueran felices y volverán a volver la vida de color, no negra. La gente cuando cogía el libro empezaba a leer y le aparecía una sonrisa en el rostro que me hacía pensar que si que había sido una buena idea.
Siguió pasando el tiempo hasta que por fin acabe mi historia, y cuando hube acabado mi historia ya no tuve nada más que hacer ahí, y me fui como la chica voladora antes que yo, dejando caer mi libro también, sobre una chica gris, como era yo antes. Mi libro la guió a ella también hasta aquí, la volvió de color y la ayudó a crear su propia historia. Así durante años y años dejando en la pared como recuerdo el retrato de esa gente que allí estuvo.

Andrea dijo...

Hola estáis leyendo una historia escrita por mi.
Esta es mi historia:
Me llamo Mr. Morris Lessmore. Soy un escritor aficionado así que no me pidáis mucho.
Era un feliz día de primavera, yo estaba en el hotel escribiendo mi libro (el que leéis ahora mismo) cuando de repente se levantó un fuerte viento. Todo empezó a dar vueltas. Las casas volaban y después de la tempestad, silencio.
Salí de la casa en la que me encontraba y todo estaba gris. Mi libro cayó del cielo abierto y, ante mi sorpresa, todas las letras habían desaparecido. Vagué por el campo lleno de casas y hojas de libros. La gente, triste, deambulaba por el campo llorando por sus familiares desaparecidos.
Seguí andando, con mi libro vacío en las manos y mientras sujetaba mi bastón unas sombras en el cielo me hicieron mirar hacia arriba. Eran libros. Volaban en todas direcciones y detrás de ellos como un trineo tirado por renos voladores iba una chica. Era hermosa, pero parecía demasiado irreal. Con un gesto de cabeza me dijo que debía dejar mi libro con ella. Lo intenté, pero no pude. Así que mandó a uno de sus libros a buscarme. Este me saludó y me dujo que lo siguiera. Yo, muy obediente, lo hice.
Al andar cada vez más, las praderas, campos, árboles y el cielo habían recuperado su color. El paseo terminó en un bonito edificio. Allí entraban y salían decenas de libros y allí entré.
Recorrí las salas y en una de ellas había fotos, muchas fotos con retratos. Allí estaba ella, colgada de sus libros joven y hermosa.
Empecé a colorearme y bailé con todos los libros, les ayudé a sobrevivir y sobretodo a tener un dueño.
Ahora era yo el DUEÑO DE LA BIBLIOTECA. Después de ayudar, me decidí a volver a escribir mi libro.
Pasaron años y años hasta que por fin terminé. terminé el libro pero también me dí cuenta de que ese "the end" que escribí no era solo para la historia del libro, sino también para mi vida.
Me despedí de mis amigos que me devolvieron al cielo y desde ahora soy yo el que va colgado de los libros voladores. Cuando me fui,los libros quedaron apenados y sobretodo sin dueño. pero de repente una niña sin color apareció en la puerta de la biblioteca.
Y LA HISTORIA VOLVIÓ A REPETIRSE¡¡¡¡¡ la biblioteca ya tenía dueña otra vez¡.

ana dijo...

AMOR A LOS LIBROS
Una de las mayores aficiones de Mr. Morris era la lectura. Él era de esa clase de personas que se podían pasar leyendo horas y horas hasta que el día acabase. Una mañana al despertarse pensó en escribir su propio libro, salió a la terraza de su casa, se sentó en una silla y así empezó a escribir su primer libro.
Parecía una mañana cualquiera, un día soleado y despejado, pero esa misma mañana Mr. Morris estaba escribiendo cuando vio volar páginas de libros y televisiones, no era algo muy común y se extrañó. Al poco rato una fuerte tormenta arrasó la ciudad. Letras, palabras y frases de todos los libros, que eran tan valiosos para él, desaparecieron, los libros volaban y la ilusión de las personas desaparecía mientras veían como la ciudad perdía su color y belleza.
El viento le empujaba la silla, se agarro con todas sus fuerzas a la barandilla ayudándose con su bastón en un intento de no caerse, pero le fue imposible.
Cuando Mr. Morris se quiso dar cuenta no encontró a nadie alrededor. La ciudad estaba vacía, lo único que se podían ver en los alrededores eran casas destrozadas y una ciudad muy pobre, sin alegría y grisácea.
Después de mirar a un lado y a otro y caminar, observando el resultado de aquella arrasadora tormenta, vio a lo lejos un edificio que parecía una antigua biblioteca, estaba rodeado de arboles, un camino de piedras le llevo a él, tenía grandes ventanales y parecía lo único que aquella tormenta no destrozó.
Intrigado por saber que escondía aquel precioso edificio se aproximó hasta allí y descubrió centenares de libros de todos los tamaños y de diferentes colores. Era alucinante, todos ellos se encontraban en estanterías llenas de polvo y pensó que necesitarían un dueño, así que Mr. Morris decidió cuidarlos y se quedó a vivir con ellos.
Ring, ring, dijo un libro que estaba al lado de Morris. Se tuvo que despertar, el libro se impacientaba. Al despertarse vio en una de aquellas estanterías de madera un libro viejo y destrozado. Él, con toda su mejor intención, quiso restaurarlo para que aquel libro retomara vida y fuese como todos los demás. Después de meditar se dio cuenta de que la única manera de curarlo para que tomara vida era leerlo.
A pesar de que a Mr. Morris le encantaba cuidar de los libros, pensó que lo mejor sería encontrar un dueño para cada uno de ellos y que fueran leídos. Consiguiendo que de esa manera todo el mundo recuperara el color y la alegría que tenían antes de aquella tormenta tan devastadora.
Los libros buscaron la manera de recompensarle por haberles ayudado tanto y tratado tan bien y ya que el pobre hombre había envejecido por el paso del tiempo y se había convertido en un humilde anciano, decidieron devolverle su juventud, así le devolverían toda la ayuda que él les había ofrecido durante este tiempo.
Mr. Morris sin fuerzas y envejecido abandonó la biblioteca. Había vivido momentos inolvidables en ella y con los ojos llorosos y a su vez feliz de haber encontrado esa biblioteca se marchó.
Los libros estaban tristes y solos hasta que un día apareció una dulce niña de pelo castaño y corto que cuidaría de todos los libros de la mejor manera que supiera, y que iba a vivir momentos maravillosos entre aquellas estanterías, porque cada libro tiene alma.
FIN. Ana Núñez Callejo

Eva dijo...

No había persona que le gustaran tanto los libros como a Mr. Morris Lessmore.

Estaba él tan tranquilo escribiendo un nuevo libro en su terraza. Empezó a levantarse viento, empezó a ver como iban volando las cosas de su alrededor, incluido él, pero lo que mas le impresionó fue ver como las letras de su libro se iban volando con el viento. Todo esto lo causo una gran tormenta que se llevo casas, libros, gente y sobre todo la vida de la ciudad, el color.

Se encontró con una ciudad destrozada, triste y gris. Caminando sin saber a donde, le pareció ver un destello de color en el cielo, vió algo mágico parecido a una persona que volaba rodeada de libros dando color a su alrededor. Un libro le hacia señales ¡Tenia vida! Y se animó a seguirle. Le condujo hasta una casa con color, con vida, se dio cuenta que de ahí provenían los libros, dentro de la magnifica casa se encontraba el libro que le había atraído hasta ella, meditó y observó que le estaban pidiendo ayuda los libros, estaban hablando con él, en su mano seguía llevando su libro gris del que las letras habían salido volando. Se puso a bailar, los libros le seguían.

A la mañana siguiente estuvo muy atareado, tenía que cuidar de los libros (vestirles, darles de comer…), a su alrededor todos los libros volaban contentos y con vitalidad, excepto dos: un libro anciano acompañado de otro mas pequeñito, estaban situados en lo alto de una balda de la que el anciano no se atrevía a bajar, Morris y el pequeño libro le animaron a bajar, en un abrir y cerrar de ojos en sus manos solo tenia trozos del anciano. Corriendo le recogió y le hizo empezó a reconstruir, una tarea muy difícil pero lo consiguió, el libro volvió a latir.Se encontraba cansado, pero sus manos no se pudieron resistir, alcanzaron su libro gris y empezaron a escribirle, de tal modo que revivió. Iba apareciendo gente pidiendo ayuda y él les regalaba un libro, automáticamente notaba como las personas dejaban de ser grises.

Cuando al fin acabo de escribir su libro era anciano, los libros al verle se sentían tristes, veían como se le iba acabando la vida, se dieron cuenta de que la había dedicado entera a ellos, por lo que todos juntos decidieron devolverle su juventud. Se fue volando como la persona mágica rodeada de libros, en el aire soltó ese libro que tanto le había costado escribir, el libro fue a parar a los brazos de una niña gris y la atrajo a la casa. Todos los libros en la casa estaban muy tristes, pero al verles volvieron a sonreír.

UN BUEN LIBRO ES UN BUEN AMIGO, DEJATE ACOMPAÑAR POR ELLOS.

Eva Martinez San Martin

Iris Rives Sardina dijo...

Mr. Morris es un hombre amante de los libros, que esta empezando a escribir uno. Pero un dia, un terrible uracán, se lleva volando todas las letras y palabras de los libros, carteleles,revistas... Los habitantes de la ciudad se vuelven todos grises y oscuros, no tienen nada que leer, no son nada sin las palabras. Mr. Morris, preocupado, sale de la ciudad a pie, para ver si esto ha ocurrido en todo el mundo,o solo allí. En su camino, encuentra a una mujer, muy feliz, es de colores en vez de blanca y negra. Pero... ¡esta volando!, puede... volar...¡es increible!. Pero lo mas extraño, es que a su alrrededor, vuelan libros. ¿Libros voladores? no puede ser. Pues es. Los libros volaban a su alrededor, se posaban en sus hombros como pajaritos. Estaba sobrevolando un campo, verde. Mr. Morris salto la valla que le separaba del cesped verde brillante, y sigió un camino que había. Legó a una casa, llena de estanterias con libros voladores. Al entrar en ella fue cogiendo color. Fue conociendo a cada libro y cuidando de ellos, los libros confiaban en el, ahora el era el dueño de aquel mágico lugar. Al igual que habia sido la mujer que vió volando. Un dia descubrió a un libro viejo, a punto de rompersse, intentó curarle, pero los demas libros le dijeron que para ello necesitaba leerle, y fue lo que hizo, le leyó. El libro se curó, y recuperó su color, como los demás. Entnces, Mr. Morris pensó que lo mejor seria que cada libro tubiera un dueño, asi que llamó a los habitantes de su pueblo, y cada uno se llevó un libro, y al hacerlo, retomo su color perdido. Mr. Morris habia segido escribiendo su libro, pero ya se habia hecho muy viejo, asi que, los libros voladores se le llevaron volando a un mundo mejor, igual que habían hecho con aquellla mujer. Otra persona se acerca a la biblioteca. Es una niña, una niña que llenará de felicidad ese lugar.

Lara Olalla dijo...

Amor a los libros:
Mr.Morris era un hombre amante de los libros que según se va haciendo mayor va creciendo su entusiasmo por leer libros.
Nuestra historia comienza cuando Mrs Morris se sienta en el banco de su terraza para escribir su libro, pero de repente, un fuerte viento azota las calles, un terrible huracán.
Todo estaba volando en el aire.
Mr. Morris desesperado esta caminando por un camino enfrente de un parque cuando de repente ve a una mujer con alrededor libros voladores.
La mujer se fue pero un libro que tenia dentro un huevo le indicó un camino que este debería seguir después.
Mr Morris emocionado sigue al libro.
Al llegar al final del camino encuentra una especie de biblioteca abandonada pero por dentro llena de toda la magia de los libros.
Al entrar Mr. Morris, una especie de torbellino de colores acoje toda la biblioteca.
Según pasaba el tiempo los libros iban confiando más en los libros y a él le gustaban cada vez más.
Con el tiempo a Mr Morris le van gustando más ese lugar por lo que al final acaba siendo el dueño de este mágico lugar.
Un día los libros dieron paso a un libro roto, desgastado y viejo, a punto de morirse.
Pero para poder curarle los demás libros le dijeron que tenía que volver a leerle.
Cuando Mr.Morris lo leyó el libro recupero todo su esplendor, recupero todo su color y ya no tenia roturas ni desgastes sino que parecía un nuevo libro.
Con el tiempo Mr.Morris iba escribiendo su libro.
Mr.Morris dio un libro especifico para cada tipo de dueño con el que ellos disfrutarían con el paso del tiempo, los libros al leerlos recuperaban su color por lo que ya no eran libros olvidados.
Mr. Morris después de mucho tiempo acaba su libro y como ya era muy viejo los libros se lo llevaron volando lejos a un mundo mejor.
Este haría lo mismo que le paso a la mujer que se fue volando.
Una niña joven se acercaba a la biblioteca esta relevaría el cargo de Mr.Morris.
La niña traería más magia hacia los libros que pospondría cuando se hiciera mayor y que otra persona privilegiada relevaría su puesto.


Lara Olalla Borge.

marta matorras alonso dijo...

AMOR A LOS LIBROS
Érase una vez un señor llamado Mr. Morris Lessmore que una tarde cuando esta intentando escribir un libro, de repente todas las cosas empezaron a volar por todos lados debido a un fuerte huracán. Se volaron hasta las letras del libro que estaba escribiendo, y en una de esas ráfagas el libro también se voló. Mr. Morris lo intentaba coger pero con el fuerte viento era muy difícil, debido a que estaba atento no se dio cuenta de que el huracán le estaba llevando a un mundo paralelo en el que todo estaba en blanco y negro excepto Mr. Morris y su libro.
Pero al abrir el libro se dio cuenta de que todas las letras habían desaparecido y se puso muy triste. Empezó a pasear para ver lo que se encontraba y vió a una chica volando gracias a unos libros que abrían y cerraban sus páginas como si fueran pájaros. Uno de esos libros se dirigió hacia él y pasando sus página que contenían dibujos rápidamente le guió hasta una casa , este libro se llamaba Huevito debido a la forma de su cabeza.
Mr. Morris se dirigió a la casa siempre llevando su libro encima y se dio cuenta de que esa casa estaba repleta de libros. En la casa vió un retrato de la chica a la que había visto antes y se fijó en que Huevito sabía tocar el piano,y con la melodía que estaba tocando se pusieron todos a bailar Mr. Morris y los libros.
A la mañana siguiente se despierta en su cama que es un libro y le visten unos libros.
Después de dar el desayuno a los libros les arregla todo lo que tengan roto y les limpia , pero se da cuenta de que uno está muy viejo y que casi no se puede sostener, y cuando Mr. Moris le dice que se tire que el le cogerá el libro al tirarse se deshace entero. Así que tiene que arreglarlo y prueba todo pero cuando ya se iba a dar por vencido Huevito le dice que la única forma de salvarlo es leyéndolo y así es como lo cura.

Por la noche decide escribir todo lo que le está pasando y el sitio donde está, en su antigüo libro. Luego decide ir regalándo los libros a las persona que estaban en blanco y negro para que los leyeran y tuvieran color.
Al final cuando ya es mayor acaba el libro y decide que ya es hora de marcharse, pero antes de marcharse los libros se ponen a dar vueltas alrededor de él y lo rejuvenecen.
Mr. Morris sale por la puerta agarrado de un hilo en el que muchos libros están sujetos abriendo y cerrando sus hojas para conseguir volar.Cuado se está llendo suelta el libro que él había escrito, y después de irse llega una niña . Esa niña hará todo lo que ha hecho él en todos esos años y después de esa niña llegará otro y así sucesivamente…..

Cristina Gispert dijo...

Era realmente una persona apasionada por los libros, dos montañas de ellos a los lados y uno en la mano escribiéndole a pluma. Surge un huracán que arrasa con todo, de manera que los libros revoletean por la ciudad y el aparece en una ciudad en la que todo estaba entristecido y humilde.
No podía seguir redactando su libro, pero en ese momento aparece un remolino iluminado de libros por el horizonte y a continuación una hermosa hada aferrada a ellos.
El hada le cede un libro al hombre para que así éste siguiera la trayectoria, se aproxima a una casa y entra, no había otra cosa que no fueran libros, algunos estaban continuamente elevados de un lado al otro de la casa, otros estaban simplemente observando al individuo desde el estante. Él asombrado camina por toda la casa, y atina con muchos más libros simultáneamente, escucha un piano sonando, se acerca y ve al fondo del pasillo, un libro tocando el piano con ritmo. Se ve animado y se sienta a tocar él también, se levanta y comienza a bailar con los libros al son del piano.
Se empieza a hacer rutina eso de vivir rodeado de libros que poseían casi las mismas cualidades que los humanos, despertarse con los chasquidos de un libro en la espalda, "vestir" a los libros con capas superiores, "operar" a aquellos libros que se van haciendo viejos...
Sigue redactando su libro sentado en la sombría de un árbol mientras que varios libros estaban llegando a formar entre todos casi una familia, se acercaban como el hombre creaba uno más de ellos (libro).
Con el paso del tiempo el hombre fue envejeciendo. Los libros estaban tristes, no querían que el hombre se hiciera mayor, los libros revolotean alrededor suyo intentando devolverle a su juventud pero éste prefiere ser un libro para alegrar la vida de todos aquellos que ven la vida en blanco y negro y ayudarles a comprender que a veces los libros son algo más que palabras que te hacen volar sin despegar los pies del suelo.

Juan Monteoliva dijo...

La historia de Mr Morris nos muestra cómo una persona puede dar vida a los libros leyéndolos. Los libros no son cosas que se tengan amontonadas. Los libros tienen vida y también nos la dan a nosotros. La vida sin libros es gris, con ellos es en color.
Cada libro, al igual que las personas, es diferente uno de otro. Cada uno cuenta lo que tiene en su interior.
Cuando los libros están en las estanterías sin que nadie los lea están muertos. Solamente cuando los tocamos y los leemos reviven.
A diferencia de las personas, los libros son eternos, su vida continúa mientras haya alguien que quiera leerlos.

Andrea Pérez Velázquez dijo...

Érase una vez un joven escritor que vivía en una ciudad tranquila. De repente llega a la ciudad un huracán que le lleva a un mundo en blanco y negro donde todos están tristes. El joven ve entre todo lo gris una pequeña mancha de color. Cuando se acerca ve una joven que va volando con unos libros. La joven le dice a uno de sus libros que vaya donde él. El libro le dice hola y que le siga. Él le sigue. Cuando llegan a su destino, una biblioteca llena de libros voladores, el joven pasa de estar en blanco y negro a color. Recorre toda la biblioteca y en un cuadro ve a la joven que se encontró. El libro que le trajo hasta allí esta tocando el piano y le dice que siga el ritmo de la canción. El joven y los libros celebran su llegada, es el nuevo cuidador de los libros y de la biblioteca. A la mañana siguiente ya que es el cuidador de la biblioteca debe cuidar a los libros:darles el desayuno,vestirles... Un libro viejo se cae de una balda y se le rompen las páginas. El joven debe "operar". Cuando parece que ya está pegado su corazón se para, entonces el libro que le trajo hasta allí´le dice que para que sobrevíva debe leerlo. El joven le hizo caso y comenzó a leerlo. A medida que lo leía iba cobrando vida. Llega la noche y el joven escritor comienza a escribir un libro. Días más tarde la gente empieza a llegar a la biblioteca para coger un libro, cuando empiezan a leerlo se vuelven de color, ya que estaban en blanco y negro. Sigue escribiendo el libro hasta que le acaba. Como ya le ha acabado y está muy mayor debe irse.Los libros le vuelven joven y vuela con ellos. El libro que ha escrito le deja suelto para que encuentre un nuevo cuidador de la biblioteca. Al final él también esta entre las fotos que vio al principio. Y además una joven encuentra su libro que le guia hacia la biblioteca.

Andrea Pérez Velázquez 1ºB E.S.O

Celia Arroyo Herrero dijo...

The fantastic flying books
MR. Morris Lessmore
-Bien sigamos, se dijo Mr. William mientras cogía su delicada pluma.
De repente mientras escribía parte de su historia el cielo se nublo y empezó a llegar un huracán toda su historia sus palabras y letras iban volando como pájaros.
-¡mi libro! Dijo mientras caía del balcón y veía su libro atrapado en un poste.
Todo empezó a volar las casas los coches de repente Mr. William se vio intentando atrapar su libro que no paraba de girar alrededor de una casa.
-¡O! mi libro todo mi trabajo.
MR. William vio todo destruido sin vida y su libro sin palabras.
Mientras caminada vio una luz de esperanza:-
-Hola caballero. Dijo una señorita que paseada unos lindos libros.
-buenos días caballero.
El la miro asombrado y mas abajo observo lo que ella llevaba ¡unos libros que volaban! miro al suyo y pensó ¿porque no? lo lanzo y tras varios intentos nada no volaba en realidad no pasaba nada.
-Buenas, dijo un libro que aquella muchacha había dejado.
Y se dirigieron a una preciosa casa.
Aquella casa era una biblioteca llena de color y libro llenos de vida junto al libro que le hablaba mediante dibujos. Pasaron los años y MR. William empezó a escribir un libro de todo lo que había vivido en aquella casa y sin darse cuenta se hizo mayor acabando así con el libro.
¡Vuela! Mi pequeño libro. Dijo.
De repente cogió unas correas y bolo con los libros como aquella señorita, así se volvería a repetir la historia una y otra vez.
Celia Arroyo

Eva Campo dijo...

Pablo dijo...
Estaba yo escribiendo mi libro, concentrado, la inspiración a pleno rendimiento. Un ciclista circulaba tranquilamente cerca del hotel en el que me hospedaba.
De repente, unas hojas empezaron a revolotear en el aire. ¡Qué extraño! Un televisor acaba de pasar volando delante de mí.
- ¡Oh, no!, las letras de mi preciado libro se van volando- exclamé.
El pobre ciclista ha salido despedido y ha golpeado el letrero del hotel.
El corredor me mira desesperado mientras pedalea contra el viento como si la vida le fuera en ello. Los libros salen volando impactando en su cara.
¡Qué horror! el viento me ha sacado de mi confortable sillón de un tirón. Aferrado al alféizar de la ventana veo con asombro cómo mi trabajo sale volando. Inmediatamente me suelto del alféizar y sigo el libro en un loco vuelo a través de la ciudad.
Mi libro se ha quedado enganchado en un cable eléctrico, y miro con horror como mi libro se desprende del cable.
Una fuerte oleada de viento me saca de mi ensoñación. ¡Los edificios están saliendo por los aires, es imposible!
La farola en la que estaba agarrado ha salido volando conmigo.
Persigo el libro por la fachada de una casa suspendida en el aire.
-¡Es de locos!- pienso- ¿Cuándo acabará esta pesadilla?
El libro ha salido despedido en el ojo del huracán.
Un fuerte relámpago me ciega, cuando la luz desaparece todo ha acabado y mágicamente el libro cae en mis manos pero… sus páginas están en blanco, todas sus palabras han salido volando junto con mi esperanza de crear una obra magistral.
La tristeza embarga todo mi ser, todo mi mundo se desmorona.
Recorro las calles del pequeño páramo donde todos lloran por su vida perdida, en aquella ciudad que una vez había sido alegre y vivaracha.
Sigo un rastro de hojas de los pequeños libros que una vez tuvieron vida pero que ahora han perecido.
Unas pequeñas sombras revolotean por el camino, miro al cielo y me quedo sin aliento… los libros están volando y van cogidos de una correa por una mágica joven, que se lleva toda mi tristeza y da color a mi vida.
Intento que mi libro vuele. Una, dos y… lanzo el libro pero no vuela, lo intento otra vez, pero ahora con más fuerza, una, dos, y… nada, no vuela.
La hermosa joven le dice a un libro que tiene sobre el brazo- ve con él-.
El libro de portadas azules revolotea hacia mí. ¡Es increíble! El libro me está hablando. –sígueme, sígueme- me repite el libro.
El libro vuela alto, muy alto entre las nubes dejando un rastro tras de sí que sigo sin reproche alguno.
El libro me lleva hasta una inmensa mansión donde no dejan de entrar y salir libros voladores. Entro… parece como si todos los libros me mirasen.
Ver las estanterías llenas de libros hace que la tristeza me abandone.
Escucho una música muy peculiar. Un libro está tocando un piano blanco como el marfil. Sin dudarlo me puse a bailar al son de su melodiosa música. Acto seguido todos los libros se pusieron a bailar conmigo. Todos los libros volaban a mi alrededor cual aves rapaces. Era un espectáculo digno de admiración.
El tomo en el que estaba recostado se despojó de mí haciéndome caer andando en unos escalones hechos de gruesos libros. Como un zombi comencé a deambular mientras los libros voladores me vestían sobre la marcha.
Continua en el siguiente comentario

Pablo Varas Domínguez 1º B ESO

Eva Campo dijo...

Aquí va la continuación de Pablo...

Llené sus tazones del desayuno de unos deliciosos cereales con forma de letras. Comencé a ponerles las portadas a los libros. Una libreta me dijo- aquí hay un libro muy antiguo, haz que vuele-
Le pedí que se lanzara hacia mí, pero cuando éste lo hizo se deshizo en mis manos dejándome con un montón de sus amarillentas hojas.
Raudo fui a socorrerle. Pegué sus páginas con esmero. El libro no respondía… mi pequeño ayudante de tapas azules me dijo:
-léelo para que pueda volver a surcar los cielos-
Yo obedecí y comencé a pasar páginas. Es increíble, comencé a experimentar sensaciones, unas me reconfortaban y otras me aterraban. Era como si cada palabra, cada frese me abriese las puertas a un mundo nuevo.
Ya es tarde le dije a los libros, es hora de dormir. Todos cerraron sus tapas y se apilaron en sus confortables estanterías. Al mirarlos recordé mi libro, sí, el libro que perdió todas sus letras, sus historias. Y lo supe. Pronto desenfundé mi estilográfica y comencé a reescribir el libro no igual que antes, esta vez sus páginas se llenaron de historias fantásticas de libros voladores, de la maravillosa domadora de libros, de todas las experiencias y recuerdos que he vivido en esta casa tan extraña que un día conocí por casualidad.
Día tras día recojo en sus páginas la vida de mis libros mezclada con mis invenciones de mi mundo imaginario…
Los libros me han cambiado la vida.
Un día una señora que sufrió el terrible huracán, llegó a la biblioteca, me preguntó sobre los libros, si podía darle uno para alegrar su vida. Satisfecho la vi alejarse hacia el horizonte, cogida de la mano de para siempre su inseparable compañero.
Como de costumbre todas las tardes me siento bajo un nogal que hay enfrente de la biblioteca a escribir mi libro.
Desde que la señora se fue, a la biblioteca llegan muchas personas para adoptar un compañero de aventuras. La satisfacción más grande que tengo es ver a la gente leer sus libros y verles alegres.
Durante toda mi vida en esa casa me he sentido muy a gusto haciendo lo que hago, y, por fin hoy puedo cerrar las tapas de mi historia. Hoy finalizado la razón por la que llegué a esa casa.
Contemplo con cierta nostalgia la biblioteca. Cojo mi sombrero de paja y mi bastón. Cuando estoy en la entrada me giro y miro con afecto a los libros, mis libros, los que me han dado mil alegrías. Todos alzan el vuelo y giran a mi alrededor. En ese mismo instante una inmensa sensación de alegría embarga todo mi ser. Los libros me dicen no te vayas, pero saben que debo hacerlo. Sin saber cómo los libros me han devuelto la juventud. Y como la domadora de libros salgo con ellos volando. Pero en la biblioteca dejaré un recuerdo mío que nunca se irá. Dejo volar mi obra, la dejo libre. El libro de portadas rojas vuela a la biblioteca, mi recuerdo permanecerá allí para siempre.
Una niña entra por la puerta de la biblioteca que un día me acogió. Se acerca hasta mi libro, lo coge, se sienta en los escalones de la entrada y comienza a leerlo. En él estoy yo, es mi historia.
FIN

Pablo Varas Domínguez 1º B ESO

paloma bascones dijo...

Es primara,el día soleaos y muy poco o nada de viento. El señor Mr Morris, está en la terraza del hotel, por su gran amor a los libros está escribiendo un nuevo libro, de repente nota que el calor aumenta acompañado de un fuerte viento del sur, y su velociad ligada a su energía todo lo transporta, vuelan los árboles, las plantas, bicicletas, libros, y el efecto mayor del viento es el vuelo del señor Ms Morris. Finalmente el tiempo ya es bueno, y el señor Morris se encuentra muy lejos, en un lugar diferente, donde el aire huele a limpio, el cielo es muy azul y las nubes dibujan sobre el cielo perfiles de notas escrita. El señor Morris, está muy asombrado mirando el vuelo de una muchacha con un libro en las manos, y globos de colores volando a su alrededor, la muchacha deja caer el libro en las manos del señor Morris, el cual le conduce a un valle árbolado, cercano a una gran casa, al entrar en la casa contempla los millones de libros, colocados en las estanterias, él tiene la sesación de que todos los libros viven en todos, algunos libros comienzan a volar y caminar. Delante del señor Morris, un libro se posa en sus manos lo abre y sale un muchacho que le enseña valiosas informaciones y en tansolo un segundo, el vuelo bajo de la muchacha llama la atención al señor Morris, ella le nombra tesorero de biblioteca, el señor Morris comprende que es solo el principio de su camino y durante muchos...muchos...años de lectura su amor por los libros a crecido, el señor Morris termina de escribir su libro, content y a la vez triste porque se da cuenta que e embejecido y la vista le faya, se frotó los ojos y vuelve a ponerse las gafas, oyó un ruedo, llaman a la puerta, era la muchacha, el señor Morris la pregunta ¿ Qué quieres de mi?.
El señor Morris escucha lo que la muchacha quería decirle, no lo oyó con los oidos, sino en su propio corazón.La muchacha aprendió poco a poco a amar a los libros, el señor Morris estaba muy feliz pues le regaló a ella su último libro, y le hizo saber su último deseo, la muchacha le contesta, no te preocues sigue tu camino, gracias por todo y cuando surja tu último deseo lo sabrás y yo también. A partir de aquel día, el señor Morris nota que su tiempo a terminado...

Eva Campo dijo...

Diego dijo...
Nuestra pequeña historia empieza en el balcón de un hotel, en una pequeña ciudad.
El señor Book lleva toda la mañana escribiendo libros (su pasatiempo favorito), cuando de repente............ empieza a soplar el aire............ cada vez más fuerte, hasta que se desató un viento tan fuerte que hacía volar libros, señores en bicicleta, las letras del hotel y de libros, casas y por supuesto al señor Book.!Oh no¡ de repente su libro ha salido volando y ha empezado a dar vueltas a una casa, pero el señor Book no le deja escapar y se sube a la casa.
Cuando la tormenta cesa, le cae el libro del cielo, pero ve que se le han volado las letras y que todo el pueblo está patas arriba. Se aleja de ese desolado lugar por un camino lleno de hojas de papel escritas.
De repente, ve libros volando alegremente que llevaban a una señora flotando. Intenta que su libro vuele pero no lo consigue. La señora le confía un libro que al pasar las páginas se ve a un señorín con la cabeza como un huevo que le guía a una enorme biblioteca en la que viven muchos libros voladores.
Al entrar, se queda asombrado al ver tantos libros voladores ir y venir. Eran de todos los colores y tamaños imaginables.
En esos momentos oye una música, buscando de donde procede, recorre interminables salas en las que hay estanterías de las que entran y salen libros.
En la biblioteca también contempla unos cuadros y en uno de ellos ve a la señora de antes.
Se gira y ve que la música proviene de un piano que el libro de la señora está tocando. Este, con su música, le convence para que baile y él baila con un montón de libros volando y danzando a su alrededor.
Después de esto, se queda dormido en un libro enorme. Su amigo Huevón (el libro del señor de cabeza de huevo) lo despierta y le viste.
Ya vestido da de desayunar a los libros letras y los “viste”.
Cuando acaba, ve que hay un libro en muy mal estado que no puede volar. Lo arregla, pero ve que todavía está mal y para curarle Huevón le dice (por signos) tiene que leerlo para sanarlo y lo hace.
A la noche ve su viejo libro y decide empezarle de nuevo, ya que sus páginas se habían quedado en blanco.
Y leyendo, cuidando, escribiendo y dejando libros (a otras personas) pasa su vida.
Cuando acaba el libro que empezó a escribir, se da cuenta de que es muy mayor y cuando se va a marchar los libros le hacen joven y emprende un viaje como la señora que vió aquél día ya tan lejano.
Cuando el señor Book ya no está, su libro vuela hacia una niña que entra en la biblioteca.
La niña coge con cariño el libro y comienza a leerlo………… desde una foto de la pared el señor Book ve como su libro al fin vuela.

DIEGO LOPEZ SOLAETA

Eva Campo dijo...

A continuación voy a poner la historia que me ha mandado Paula Diez que como es muy larga la podéis leer en dos comentarios.

La Casa de la Riqueza


Cuenta una historia...
Que hace ya un tiempo, el Señor Tómas leía tranquilo en su terraza, acompañado como de costumbre por sus queridos libros...
-Sí, sí, esto así... Le añado esto... Y... Luego esto... –Se decía para sí.
De repente, una fuerte ventolada hizo que desaparecieses las palabras de su novela llevándose también, carteles, coches, farolas... ¡Incluso a gente!
¡Ayúdenme! –Gemía un señor volando en bicicleta.
El Señor Tómas hacía lo posible por no desprenderse de su libro y se agarraba a cuanto podía.
-¡Librito, espera, no te muevas, ahora voy por ti! –Se la mentaba el hombre.
El viento no cesaba y el Señor Tómas perseguía su libro sin rumbo.
Vuelta y vuelta, el viento le llevaba y balanceaba sin “ton ni son”
En solo un instante se vio encerrado en el interior de un huracán de nubes sin destino a la vista.
De pronto, todo lo absorbido por aquel fenómeno natural calló en una remota llanura, todo sin color y escaso de gracia.
Su querida novela calló frente a él, todas las letras había desparecido, la ilusión, la alegría, la imaginación, y el relato de su historia se habían perdido.
-Como puede ser. –Se lamentaba.
Caminaba por aquella extensión el hombre. Solo se observaba gente sin ilusión y alegría sin imaginación y sobretodo, sin color.
En el cielo, se reconocían libros voladores y una linda mujer paseándolos, como si de perros se tratasen.
-OH –Exclamó el hombre.
El color comenzó a emerger del horizonte y la mujer de morenos y largos cabellos le devolvió su preciada novela, junto con un librito con unas pequeñas piernitas, lleno de color y con un gracioso dibujo con vida. Tenía un cuerpecín de huevo e iba vestido igual que el hombre, con un sombrero de paja, rodeado por un lazo rojo, una pajarita al cuello y un traje azul celeste.
-Hola, buenas, soy mr. Robin –Se dirigió al hombre aquel dibujo.
-Ven conmigo, sígueme.
-¿A dónde me vas a llevar? –Preguntó Tómas algo aturdido aún por aquel viaje.
Emprendió camino detrás de aquel libro volador de tapa azul y piernecitas colgantes. De entre la arboleda de aquel extraño lugar surgió una curiosa casa, de altos techos y ventanas con fachada color blanco níveo. Se decía que era... La Casa de la Riqueza, un lugar escondido, al que jamás nadie había accedido.
Libros salieron de recónditos lugares de aquella arboleda, sobrevolando, e invitándole a entrar.
-Aalaaa... Este lugar está repleto de libros con vida –Exclamó.
Era una enorme biblioteca llena de libros en estanterías que volaban y sobrevolaban de balda a balda, todos aguardando su llegada.
-Hay libros, y más libros, y todos tienen vida.
Aquel dibujillo se puso a tocar el piano, como señal de bienvenida y Tómas, junto con los demás libros comenzaron a bailar. Disfrutando así de aquella obra.

* * *

Eva Campo dijo...

Continuación de la historia de Paula...

Eh, deprisa, ya es la hora –Gruñía mr. Robin.
El Señor Tomás se encargaba de cuidar a todos aquellos libros y por tanto, no podía quedarse dormido.
Descubrió entonces a un libro ya viejito, con las tapas llenas de polvo y con todas las páginas rotas, al que más tarde, tuvo que pegar y arreglar.
-Tómas, así no conseguirás que el libro recobre su vida, debes leerlo, abrir sus hojas. –Le advirtió Robin.
Y así sucedió, lo leyó y empezó a recobrar sus letras, sus dibujos, todo.
El libro estaba como nuevo, listo para leerse. Estaba en perfectas condiciones.

* * *


El tiempo había transcurrido y su novela estaba siendo acabada de nuevo.
Contaba en ella, lo que había vivido en aquel lugar, como la gente sin color, había ido poco a poco a esta biblioteca a recoger su libro, y como nada más leerlo, recuperaban la alegría.
Su estancia allí había acabado, era hora de marcharse.
-No Señor Tómas, no se vaya. –Decía Robin con gesto triste.
Todos los libros restantes acudían a su despedida rodeándole, revoloteando a su alrededor. Sus hojas se movían y agitaban haciéndole una señal de adiós.
Dejó allí, junto a los demás libros, su novela terminada.

Abandonó aquel lugar, viendo desde el cielo como una niña llegaba hasta allí, y cogía su novela. Más tarde iban llegando más personas y recogían un libro. Volviéndose de color y recobrando la felicidad.


Aquel tornado quería avisarles de la importancia de los libros, que para que no se olviden deben ser leídos, que además, les proporcionaban grandes conocimientos, aventuras, romances, comedías...

PAULA DIEZ MIGUEL 1º B ESO

Juan Monteoliva Moreno dijo...

Había una vez un escritor muy bueno que se llamaba Juan. Le gustaba mucho escribir y leer. Un día, que estaba escribiendo tranquilamente en la galería del hotel en el que se alojaba, se desató un terrible tornado que fue arrasando todo lo que encontraba a su paso.

El viento arrastraba todo lo que encontraba a su paso. Lo más preocupante es que se llevaba las letras del libro que estaba escribiendo. Intentó agarrarlo con todas sus fuerzas pero todo fue inútil, el terrible huracán arrancó el libro de sus manos. En unos instantes, que a Juan le parecieron eternos, apareció en un lugar desierto y gris rodeado de destrucción y caos. Afortunadamente su preciado libro cayó a sus pies pero estaba vacío, el tornado se había llevado las letras de su interior.

¡Qué mundo era ese! Todo era gris, todo estaba destrozado.

Algo llamó la atención de Juan allá en lo alto. Parecía un hada seguida de un montón de libros voladores. La vida volvía a tener color allí. Juan tenía que salvar su libro. Intentó lanzar su libro para que el hada lo recogiera pero ésta volaba muy alto y no lo consiguió. El hada, al ver los esfuerzos que hacía, le envió uno de los libros que llevaba para que le guiara.

Este libro, que volaba como todos los que había en ese “paraíso”, le llevó hasta una especie de biblioteca. Al entrar, Juan se dio cuenta que allí vivían los libros voladores. En ese lugar los libros tenían vida propia, vivían felices en su mundo ideal. Contentos le dan la bienvenida, ya tienen alguien que cuide de ellos.

Juan se ocupa de ellos, casi todos están en buen estado pero hay uno que necesita ser atendido con urgencia. Es un libro que tiene muchos años y está bastante estropeado. Juan pega sus hojas con mucho cuidado pero no consigue reanimarlo. No sabe qué hacer hasta que siente curiosidad por lo que hay en su interior y comienza a leerlo y así le devuelve la vida.

Ha llegado el momento de escribir el libro de su vida. Tiene que contar la historia de “La Casa de los Libros Voladores”. Mientras la escribe va repartiendo los libros entre las personas que llegan a la biblioteca. Su vida ya no será gris, tendrá el color y la alegría de todos estos maravillosos libros.
Juan, ya anciano, acaba su libro y decide volver al mundo del que el tornado le sacó inesperadamente. Los libros se pusieron un poco tristes pero en pago a su dedicación le devolvieron su juventud y le dieron el poder de volar. ¡Qué felicidad, podría recorrer el mundo repartiendo libros para dar color a los mundos grises en los que no se leía! Al igual que el hada con la que se encontró hace tantos años, dejó caer el libro que acababa de escribir en manos de una niña que lo leería y descubriría la historia de “La Casa de los Libros Voladores”.

manuel ruiz mendi dijo...

Manu Ruiz dijo...

Mr Morris es un persona que le encantan los libros, parece que cuando lee uno de ellos cobra vida y se mete en el como si fuera el quien lo viviese.
Un día Morris estaba escribiendo un libro cuando un gran viento se llevo a las personas y a los libros que se les calleron las letras, todo ello se fue a un agujero negro y allí nada tenia color, Morris iba caminando por la calle y se veía todo apagado, en blanco y negro, estaba todo muy triste, cuando todo estaba apagado vio que una chica que volaba a color, tenia los colores mas fuertes nunca vistos pero el ni se lo creía, iba volando colgada de unos libros que parecían pájaros o algo por el estilo. Uno de ellos se separo del grupo y fue donde Mr Morrison, en cuanto le toco, Morris cogió color y el libro se volvió a separar pero al verle otra vez sin color volvió a acercarse se puso de nuevo a color, el libro le llevo hacia una casa, no parecía muy grande pero todo estaba a color, cuando entro se quedo anonadado vio todo lleno de libros, los libros tenían vida propia, hasta uno de ellos tocaba el piano, el libro tenia ilustraciones de un huevito que se le cambiaba la cara de triste a alegre dependiendo del momento.
todo lo que había en esa casa eran libros con vida, pero unos de ellos de veía que estaba mal, era el mas mayor y a Morris le llevaron donde el. El pobre libro estaba muy mal y el decidió operarle, todos los libros le ayudaron cuando todo parecía que estaba perdido, el gran libro echo a volar como si un niño fuese se llevo a Morris volando por la casa y aterrizo todos los libros aplaudieron la operación fabulosa que hizo.
todas las personas del pueblo estaban en blanco y negro, todos aquellos que cogían un libro volvían a tener color.
cuando Mr Morrison era una persona mayor ya termino de escribir su libro se le llevaron otros libros volando pero su libro se quedo en aquella casa de los libros.
Una niña jovencita que se acerco a la casa cogió el libro de Morris y rápidamente cogió color, la jovencita se puso a leer el libro de Morris y...
La niña se ocupo de ser la nueva cuidadora para los libros, una nueva historia volvería a empezar para la joven niña.

Maria Moya dijo...

Mr Morris se encontraba en la terraza de su casa, leyendo un libro, un día soleado, hasta que una especie de tornado se llevó todo por medio,casas, pisos, calles, farolas.
Apareció en otro mundo, en un planeta en el que todo al principio era blanco y negro,triste, como si nada tuviese vida. Todo comenzó a tener color en ese momento en el que llegó el hada reboloteando, con su libro en la mano.
Uno de estos se le dio a Mr Morris, el cual instantáneamente le hizo tener color.
En aquella biblioteca vieja en la que se paró era como una casa llena de libros que cobraban vida, que sentían como personas.
Se sumergió en esa historia, en esa vida en la que todo tiene que ver con un libro.
Los libros pueden hacer mostrar lo que una persona siente sin necesidad de hablar, simplemente con palabras.
El leer uno de estos puede llegar a cambiar tu estado de ánimo, pensar o desconectar de todo.
Mr Morris al hacerse mayor no murió, se convirtió en uno de tantos libros colocados en aquellas estanterias.
Los libros nunca mueren, perduran y se recuerdan siempre.
Después de Morris, otra niña quiso entrar a la biblioteca y la cual, nada mas entrar, se lleno de color, de felicidad.
Los libros pueden hacerte vivir en un sueño, en otra vida, sin necesidad de levantarte de la cama.

Anibal Díaz dijo...

Mr Morris era una persona al que le gustaban mucho los libros, tanto que decidió escribir uno. Pero cuando se puso manos a la obra llegó una tormenta llevándose consigo la ciudad entera y transportándole a él a un lugar donde solo habia desolación y oscuridad. Habia perdido las letras y parecía que todo era negativo en su mundo, hasta que apareció el hada de los de los libros y le indicó el camino de la biblioteca, donde los libros eran felices , Mr Morris encontró en ese lugar el sitio ideal para escribir su libro y envejecer con ellos. Pasaron los años y al tiempo que envejecía fue construyendo su obra y ayudando a la gente a que leiyese y en encontrar la felicidad y el conocimiento. Al final de su vida dejó su libto junto a sus amigos de la biblioteca y emprendió el camino con el hada de los libros hacia un lugar determinado.

Beatriz Del Valle Mellado dijo...

Este cortometraje me ha trasmitido interés y entusiasmo por la lectura.
Pienso que los libros te ayudan a llenar la vida de color y de magia y nosotros les ayudamos a que nunca mueran. Los libros no son simples adornos para decorar y no tienen vida si no hay nadie que los lea.
Muchas veces no nos damos cuenta de que los libros esconden grandes historias, que sólo ellos nos hacen descubrir la magia que les acompaña y que tantas veces nos sorprenden, que son capaces de trasladarnos a un mundo diferente donde la imaginación no tiene límites. Los libros no hablan, pero nosotros al leerlos les ponemos voz e imagen que nos transportan a ese mundo imaginario que describen. Nuestra vida, como la de Mr. Morris, necesita la luz y el color que proporcionan los libros.
Cuando un escritor escribe un libro, su intención es que su legado perdure y la mejor manera es que sus libros sean leídos por mucha gente, de esta forma no sólo sus libros permanecen vivos, sino también su propia vida, ya que en muchas ocasiones los libros reflejan experiencias del autor, como en el caso de Mr. Morris que escribe un libro sobre su vida y lo deja en la biblioteca para que pueda ser leído, así él permanece vivo en la mente del lector.

Unknown dijo...

Que significaba que mr.morris da de comer a los libros ,los viste y baila con ellos