Esta semana os propongo un fragmento de la novela "Suave es la noche" del escritor norteamericano Francis Scott Fitzgerald: todo lo que vivimos nos va marcando de una u otra manera, a veces no todas las heridas cicatrizan con el paso del tiempo...
Se habla de que las heridas cicatrizan, estableciéndose un paralelismo impreciso con la patología de la piel, pero no ocurre tal cosa en la vida de un ser humano. Lo que hay son heridas abiertas; a veces se encogen hasta no parecer más grandes que un pinchazo causado por un alfiler, pero siguen siendo heridas. Las marcas que deja el sufrimiento se deben comparar más bien a la pérdida de un dedo o la pérdida de visión en un ojo. Puede que en algún momento no notemos que nos faltan, pero el resto del tiempo, aunque los echemos de menos, nada podemos hacer.
"Suave es la Noche", Francis Scott Fitzgerald.
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| Ilustración: Nicoletta Ceccoli |
15 comentarios:
Este texto en el fondo me a gustado, me a costado pillar un poco de que iba y lo e tenido que releer unas cuantas veces, pero por lo demas me gusta como se expresa el autor
yo creo que quiere decir que no solo nos duelen las heridas fisicas que las psicologicas nos duelen tanto o mas que las fisicas.Me ha gustado bastante porque estoy de acuerdo.
Yo creo que este fragmento tiene toda la razón, hay hechos, circunstancias y personas que nos dejan marca en el corazón y por mucho que intentes olvidarte de ellos o creas que ya han pasado van a permanecer ahí. Porque no son mas que cicatrices, heridas que luego se cerraron pero la marca segura estando contigo, aunque no te des cuenta. Yo creo que las heridas que mas duelen son las que afectan al corazón (sentimientos), porque este pude perdonar, pero jamas olvidar.
Me ha gustado mucho este texto y creo que es muy realista.
Yo creo que este texto claramente trata de que las heridas mas dolorosas no son las físicas sino las psicológicas las que se te quedan permanentes para toda la vida, que por mucho que se intenten olvidar o cicatrizar es imposible, siempre estarán ahí.
Algo que puede marcar mucho a una persona es la pérdida de un ser querido y cuanto mas cercano sea, mas dolorosa y permanente será esa pérdida.
Este texto me ha gustado, sobre todo cuando lo he entendido. Yo creo que habla de las heridas que recibimos durante la vida, y no solo las físicas, sino las psicológicas, el daño que nos puede hacer otra persona.
Pablo Cordero
Este texto me ha gustado mucho, habla de que hay heridas que no cicatrizan, no la físicas si no las psicológicas, que normalmente son las que mas daño hacen. Tarde o pronto nos acaban haciendo de este tipo de heridas y cuando te las hacen comprendes este texto
Hay momentos en la vida, que producen heridas físicas en nuestro cuerpo que cicatrizan y desaparecen con el tiempo, pero hay otro tipo de heridas que no se curan nunca y son aquellas que influyen en nuestros sentimientos, como la perdida de un ser querido, algo que siempre permanece en nuestro corazón o una decepción de alguien a quien considerabas amigo.
Este me ha parecido muy bueno porque se refiere a que hay cosas mucho mas peores que el dolor psicológico, por ejemplo que te deje tu novio esas heridas que no te vas a quitar de la cabeza, pero como dice en el texto es peor perder un brazo o un ojo que aún chico
Alberto Gándara Revilla
Todas y cada una de las personas de este mundo estamos marcados por heridas. No me refiero a las heridas físicas que se pueden apreciar a la vista, son otro tipo de heridas, heridas incluso más profundas y dolorosas que cualquier corte o cicatriz. Son esas heridas que te marcan, y que te hacen ser más fuertes día a día. Con el tiempo, esas heridas se hacen tan pequeñas que parecen desaparecer, pero siempre habrá una persona, un momento, o un lugar, que te hagan recordar y que consigan volver a abrirlas.
Con el tiempo todas las personas nos damos cuenta de cuales son las heridas que nos van marcando a lo largo de la vida, en este caso el tiempo no es el encargado de sanar estas heridas, pues ellas siempre están presentes en el corazón, y por mucho que las intentes olvidar, siempre habrá un momento o una persona que te las recuerde.
Todas las personas tenemos heridas sin curar, precisamente no son físicas. Podemos perdonar porque todo el mundo tiene errores y decimos que lo olvidamos pero ¿lo olvidamos todo? yo pienso que hay cosas que son imposibles de olvidar y es por eso que a veces las heridas más diminutas son las que más duelen, por mucho tiempo que pase.
Normalmente las heridas que más duelen son creadas por las personas más cercanas a ti, las que mas quieres.
Me a gustado porque tiene toda la razon hay cosas que te pueden hacer daño un tiempo, otras dias pero hay algunas que duran para siempre, como en el amor o la muerte de alguien querido
En esta vida, casi con cada error, o con cada experiencia se forma una herida. Hay muchos tipos de heridas, desde aquellas pequeñas que nos ayudan a mejorar como personas, hasta las más grandes, esas que se te quedan clavadas tan fuerte que por mucho tiempo que pase, nunca cierran del todo. Los pequeños errores que cometemos en nuestro día a día son heridas que asumimos como aprendizajes para nuestra vida. Pero también están esas otras, causadas por los seres que más queremos, que son imposibles de olvidar una vez hechas. Este tipo de heridas se forman por la traición, por el amor no correspondido o por la pérdida de alguien querido. Cuando ocurre alguna de estas cosas, siempre tendemos a pensar que somos los culpables de lo sucedido. Pero lo cierto es que la vida es un aprendizaje continuo, y debemos saber que a pesar del dolor, esas heridas son inevitables, que por muy hondo que se claven, ellas contribuirán a formar nuestra personalidad, y siempre, nos harán más fuertes.
Me gusta este texto porque dice la verdad, una idea, un pensamiento o un comentario pueden doler mucho más que una herida física, por otra parte, esa es una manera muy negativa de ver la vida, el tiempo es la mejor medicina para muchos problemas.
Carlos González Gozalo 3ºA ESO
Me gusta este texto porque dice la verdad, una idea, un pensamiento o un comentario pueden doler mucho más que una herida física, me ha costado entender un poco el tema del texto y leido unas cuantas veces, pero por lo demas me gusta como se expresa el autor.
Javier Bárcena Vega 3ºa
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